martes, 5 de abril de 2011

Hoy he aprendido de los ir y venir de la vida...constante vaivén. Decisiones, indecisiones. Amores, desamores. Ilusiones, desilusiones. Decepciones. Si y no. Encuentros, desencuentros. Reconciliaciones y mil de cosas más que talvez siempre conllevan a un mismo puerto. De alguna forma u otra es tan difícil vivir, o mejor dicho...se nos hace difícil vivir. Se nos hace difícil tratar de conciliar todo de una vez, y nisiquiera debería de ser así, porque tampoco se puede...no se puede vivír de amor, de felicidad, de pena y alegrías si no las vives cada una a su manera y no juntas.
Cada ser humano es diferente en esencia, cada vida es distinta. Algunas son más alocadas, algunas más despreocupadas, otras ni decir. Hay de todo, hay de personas que visten raro hasta que te miran raro. Hay personas a las cuales no les puedes decir nada porque de un grito te hacen callar, las hay de la que no te dicen nada, pero te dicen de todo a la vez. Hay vidas, hay mundos, hay personas y hay mucho más. Hay de todo y en paralelo. Cada ser humano contrarrestra con el otro. Somos todo y nada, nada y todo. Llega a ser absorvente y a veces inentendible. A mís 21 años juro que me cuesta creer que llegué a este mundo, todavía no tengo claro el para qué ni menos el porqué y no sé si me interese. Supongo que todos tenemos algo que hacer aquí, bien o mal da igual. Estamos, por esencia estamos como lo dije en un par de líneas anteriormente. Y pensar que: todo es ahora, todo ocurre en este preciso instante. Siempre. Creo que eso me consuela para tratar de entender lo que quiero entender si es que se puede...